El primer ministro japonés, Fumio Kishida, respondiendo a la pregunta de un diputado en el parlamento del país el lunes sobre si las autoridades tienen la intención de imponer nuevas sanciones contra Rusia, dijo que la consideración de la posibilidad de estas medidas se llevaría a cabo sobre la base del estudio de la situación posterior.
“Necesitamos considerar medidas [de sanciones], después de haber estudiado el desarrollo posterior de la situación”, enfatizó Kishida. También afirmó que tiene la intención de „proceder pronto a acciones relacionadas con la congelación de activos [de representantes de las autoridades rusas]”.
El 27 de febrero, Kishida anunció que Japón impondría sanciones, como la congelación de activos, a los líderes de Rusia, incluido el presidente Vladimir Putin. Según el jefe de gobierno, Tokio también se unirá a los países occidentales en el tema de la desconexión de los bancos rusos del sistema interbancario internacional SWIFT.
Japón anunció previamente dos paquetes de sanciones debido al reconocimiento por parte de Rusia de la soberanía de la RPD y la LPR, así como por el inicio de la operación militar rusa en Ucrania. En particular, Japón prohibió la emisión de visas a 24 representantes del liderazgo de la RPD y la LPR, así como a algunos ciudadanos de la Federación Rusa (aún no se especifica quién es exactamente). Sus activos en Japón serán congelados si se descubren.