A medida que el gasoducto de gas natural Nord Stream 1 de Rusia se cierra para el mantenimiento anual programado, algunos comerciantes particularmente desenfrenados tienen pensamientos flotando en sus cabezas de que Rusia cortará por completo el suministro de gas a Alemania, sumiendo a la economía de Europa en un caos total.

   Gráfico EUR/USD en intervalos de 1 hora

El euro se mantuvo por encima de la paridad frente al dólar el lunes, ya que el gasoducto de gas natural más grande que lleva gas ruso a Alemania se cerró por mantenimiento anual y se espera que los suministros se detengan durante 10 días.

A los inversores les preocupa que el cierre pueda extenderse debido al conflicto en Ucrania, lo que limitaría aún más el suministro de gas a Europa y provocaría una recesión en la economía de la eurozona.

„La mayoría de los impulsores clave de la reciente debilidad del par -el sentimiento de riesgo, la divergencia en la política monetaria entre la Fed y el BCE, y otros- no parecen mejorar en el futuro previsible, y los temores persistentes sobre una reducción en el suministro de gas ruso a la UE dejará el euro bastante poco atractivo”, según los estrategas de ING, según informan en una nota a sus clientes.

El euro cayó a la paridad en 1,0072 dólares el viernes después de que los datos de empleo en EE. UU. superaran las expectativas en junio antes de rebotar al alza.

El lunes, la moneda única bajó un 0,8% a $1,0107/$1,0107 debido a una fuerte ganancia del dólar estadounidense debido a que los inversores temen el riesgo.

El dólar subió a un máximo de 24 años frente al yen el lunes después de que los sólidos resultados electorales de la coalición conservadora gobernante de Japón no indicaran cambios en la política monetaria laxa.

Llegó a 137,28 yenes en las operaciones matutinas, el nivel más alto desde finales de 1998. Luego redujo ligeramente esa ganancia y subió un 0,6% a 136,93.

Las expectativas para la próxima publicación de los datos de inflación de EE. UU. para junio reforzarán los acuerdos de aumentos agresivos de tasas por parte de la Reserva Federal y empujarán al dólar al alza. Según una encuesta de Reuters, la tasa será del 8,8%, un nuevo máximo en 40 años, en comparación con el 8,6% de junio.